Marciniak: Más Allá del Terreno de Juego
En el mundo del fútbol, el VAR ha generado un debate constante sobre su impacto en las decisiones arbitrales. A menudo, el foco de la crítica recae sobre el árbitro principal en el campo, olvidando la influencia del equipo arbitral detrás de las pantallas.
Recientemente, el nombre de Marciniak ha resonado entre aficionados atléticos y culés, unidos por una sensación de agravio. Se le recuerda por decisiones polémicas, como un penalti señalado a favor de Julián Álvarez, aunque la responsabilidad del doble toque recayó en Kwiatkowski, desde la sala VOR.
El VAR, con sus intervenciones, a veces intempestivas, crea distorsiones que nos llevan a juzgar al árbitro visible, sin considerar el papel cada vez más decisivo del árbitro en la sala VOR, protegido de la mirada pública.
Un ejemplo de esto fue un penalti señalado que, afortunadamente, no influyó en el resultado final gracias a la intervención del portero rival. Más allá de las polémicas arbitrales, se han visto partidos de gran nivel, con actuaciones destacadas de porteros que recuerdan a las mejores versiones de Courtois. Partidos intensos y trabajados donde el esfuerzo del equipo eliminado no siempre se ve recompensado.