El Atlético sentenció a Pezzolano en Zorrilla
El Atlético de Madrid dejó su sello en Zorrilla en un partido de la primera vuelta que tuvo consecuencias directas en el banquillo del Real Valladolid. La contundente victoria rojiblanca no solo sumó tres puntos importantes para el equipo, sino que también precipitó la salida de Paulo Pezzolano como entrenador del conjunto blanquivioleta.
El encuentro, correspondiente a la jornada 15 de Liga, evidenció las carencias de un Real Valladolid que ya atravesaba una situación delicada. La derrota en casa actuó como la gota que colmó el vaso para una directiva que veía cómo el equipo se hundía en la clasificación.
Antes del partido, el Valladolid acumulaba tan solo nueve puntos en 15 jornadas, situándose como colista y con la permanencia cada vez más lejos. La situación del Real Valladolid no mejoró tras la destitución de Pezzolano.
El paso de Álvaro Rubio como interino, seguido por la breve etapa de Diego Cocca, no lograron enderezar el rumbo del equipo. Finalmente, Rubio regresó al banquillo en un intento por cerrar la temporada de la manera más digna posible, aunque sin éxito.
Este episodio subraya la capacidad del Atlético para influir en el devenir de la temporada de otros equipos, demostrando su solidez y ambición en la competición liguera. Una victoria que, más allá de los puntos, dejó una huella imborrable en el destino de un rival directo.