El Abuelo que Salvó al Atleti: Ramón Grosso, del Madrid al Manzanares
La historia de Ramón Grosso, abuelo de Marcos Llorente, es un capítulo curioso en la rivalidad entre el Atlético de Madrid y el Real Madrid. En la temporada 1963-64, el Atlético pasaba apuros económicos y deportivos, llegando a ser colista en la jornada novena.
Ante esta situación, el entonces presidente del Atlético, Javier Barroso, solicitó al Real Madrid la cesión de Grosso, un joven delantero del Plus Ultra. Grosso debutó con el Atlético en la segunda vuelta y su impacto fue inmediato.
En su primer partido, marcó el gol de la victoria ante el Murcia, un tanto crucial que sacó al equipo del último puesto y marcó el inicio de una remontada. Aunque solo jugó una temporada, Grosso contribuyó significativamente a la salvación del Atlético, que finalmente terminó séptimo.
Tras su paso por el Atlético, Grosso regresó al Real Madrid, donde tuvo una exitosa carrera de doce temporadas, ganando la Copa de Europa de 1966, siete Ligas y tres Copas. Se convirtió en un símbolo del club, conocido por su entrega y pundonor.
A pesar de su exitosa carrera en el Real Madrid, Grosso nunca olvidó su paso por el Atlético. Curiosamente, años después, su nieto, Marcos Llorente, terminaría jugando en el Atlético, demostrando una vez más las vueltas que da el fútbol.